Cada proyecto de un autor que decide autopublicar es tan especial para él como para mí. Libella es el sello editorial que decidí diseñar para acompañar a los autores que eligen emprender su camino conmigo.
Para autopublicar es necesario animarse a dar un gran paso hacia la realización personal, la madurez emocional y el equilibrio entre la vida real y los sueños, que pueden estar más unidos de lo que imaginamos.
Así son las libélulas, quienes inspiraron el nombre de mi sello editorial. Su vuelo a través del agua representa el acto de ir más allá de lo que está en la superficie y poner el enfoque en los aspectos más profundos de la vida.
Mi vuelo personal comenzó hace más de 20 años y quiero invitarte a experimentar la increíble sensación de que tus palabras y pensamientos se transformen en un libro que puedas atesorar por siempre.